Análisis
Carlos de Ayala
Varias franquicias de combates han regresado en estos últimos años y según parece la lucha en su sentido más clásico vuelve a estar de moda, aunque bien es cierto que los últimos intentos de realizar un Mortal Kombat que aplacase las ansias de los jugadores de la franquicia de tener un episodio sobresaliente no tuvo mucho éxito con Mortal Kombat Vs. DC Universe, temiéndose incluso en algún momento por la vida de la franquicia debido a la quiebra de Midway. Para ello, Warner Bros. Interactive Entertainment y NetherRealm Studios con su líder, Ed Boon, creador de la marca, al cargo de esta nueva entrega llamada a revitalizar la saga para adecuarla a los tiempos que corren y ofrecer un producto que pueda competir en igualdad de oportunidades con el resto de juegos de lucha que pueblan el catálogo de PlayStation 3 y Xbox 360.
2K Sports lanza su cuarta entrega de la franquicia de Tenis, Top Spin, el indiscutible rey de los simuladores que se alejan de las mecánicas arcades para ofrecer simulación de calidad, fiel y divertida, como es costumbre en las marcas deportivas que maneja la compañía, máximos referentes en las disciplinas que aborda, el baloncesto con su impecable NBA 2K y el tenis con este Top Spin, que salta a la pista con una ambiciosa apuesta que presta especial atención en esta cuarta edición a un sistema de control mejorado y un robusto modo carrera que combinado con un notable modo multijugador pretende ganar bola, set y partido. Durante las siguientes líneas intentaremos desentrañar los misterios de esta nueva entrega del simulador más serio y completo del catálogo de PlayStation 3 y Xbox 360.
El estudio de desarrollo canadiense BioWare y Electronic Arts ya han puesto en la calle Dragon Age II, el esperado regreso de la franquicia RPG que estrenaba la marca con una obra que obtuvo una buena acogida y adquirió gran popularidad gracias a un formato enmarcado en un universo de fantasía que rompía algunos moldes en la interpretación de su argumento y añadiendo a la fórmula un formato lo suficientemente familiar como para permitir al jugador sumergirse en el universo que proponía el juego de forma rápida e intuitiva. Ahora para la secuela y con la intención de los maestros de Bioware de crear una nueva experiencia en la que nuestro protagonista está llamado a convertirse en la figura más importante del universo Dragon Age, acompañaremos a Hawke en un camino plagado de peligros, feroces enemigos, decisiones que variarán el sentido de nuestro viaje y un sistema de repercusiones que ofrece una exposición de nuestra personalidad sobre los habitantes del universo en el que se desarrolla la franquicia.
En su ímpetu por llegar al mercado occidental adaptando sus formatos clásicos, Tecmo Koei varia el contexto de su archiconocido Dynasty Warriors y lo enfoca a paladares de gustos mas occidentales recogiendo La Ilíada y mucho de lo que allí se cuenta como marco argumental de Warriors: Legends of Troy. Así se presenta este beat ‘em up clásico, que por primera vez cambia de ambientación y se atreve con una argumentación alejada de historias orientales y fuegos mágicos.
Con una buena campaña promocional a sus espaldas, People Can Fly y Epic Games combinan esfuerzos para ofrecernos el esperado Bulletstorm, acción plástica en estado puro combinada con mucha pirotecnia y humor bizarro. Un título que ha dado mucho que hablar y que carga a sus espaldas con ríos de tinta por razones tan variadas como su contenido violento, las parodias de otros Blockbusters de la industria como Halo o Call of Duty y el empeño de ambos estudios en reafirmar hasta la saciedad que Bulletstorm es una creación diferente a lo que estamos acostumbrados en el género. Pero ¿Realmente es tan innovador? ¿Y violento? Durante las siguientes líneas te ofrecemos nuestra valoración de un juego que ha ido ganando seguidores con tan solo una campaña de promoción agresiva, cómica y cargada de promesas que se cumplen, pero no en toda su extensión.
El contenido extra de calidad supone un enorme aliciente y una efectiva herramienta para prolongar la vida de un videojuego cuando languidece y deja paso a novedades y nuevas experiencias. Sin duda Activision y sus notables paquetes de contenido para la serie Call of Duty no están enfocados a expandir la experiencia que ofrece el multimillonario shooter, si no a alargar la vida útil del juego en su vertiente multijugador. Como no podía ser de otra manera, Treyarch el encargado de desarrollar Black Ops, ha sido la responsable de desarrollar First Strike, el primer paquete de contenido descargable para el rey del juego en línea.
Capcom retoma la veterana franquicia Bionic Commando con la secuela de Rearmed, una serie de juegos para el catálogo de descargables que llega con la lección de errores pasados bien aprendida y facturando un juego que nos devuelve el control tradicional que tanto gusto en el primer Readmed y al carismático capitán Nathan Specter, que de nuevo se enmarca en su entorno natural para ofrecer horas de Jugabilidad retro y mucha diversión.
Si bien es cierto que Hydrophobia fue lanzado en su primera forma hace algún tiempo en Xbox Live Arcade recibiendo un aluvión de justificas y atroces críticas por parte de prensa y público, el equipo de desarrollo del juego gracias a las bondades que ofrece el sistema de distribución digital ha reconvertido gran parte del juego en su forma original con una adaptación de si mismo que mejora sobremanera el resultado que ofrece tras la revisión; De este modo intentaremos hacer algo de justicia a un juego que seguramente no fue lo suficiéntemente estudiado por sus propios editores y desarrolladores antes de la primera aparición como título completo.
Cuando se anunció el desarrollo de Dead Rising 2 muchos jugadores no entendieron el cambio en el personaje principal, dejando al intrépido y carismático Frank West fuera del plantel protagonista para dar paso a Chuck Greene, un motorista anodino y un triste padre de familia envuelto en la vorágine que propone el juego de Capcom.
Microsoft Game Studios y Lionhead Studios con el carismático Peter Molyneaux a la cabeza presentan la tercera entrega de la franquicia Fable despejando algunas dudas y ampliando la experiencia que ofrece la marca a otro tipo de jugador de corte más casual, un nuevo giro que elimina de la ecuación muchos de sus elementos roleros para enfocar el título hacia disciplinas propias de las grandes aventuras, sin variar ni el espíritu, ni las señas de identidad de la marca.
