“Estamos al tanto de los problemas de estabilidad y rendimiento de 'Tomb Raider' en las tarjetas gráficas GeForce al poner el videojuego con los ajustes máximos. Desafortunadamente, Nvidia no recibió el código final del videojuego hasta este fin de semana pasado, lo que redujo sustancialmente la estabilidad, calidad de imagen y rendimiento con respecto a la versión anterior que recibimos. Estamos trabajando conjuntamente con Crystal Dynamics para abordar y resolver todos los problemas del videojuego lo más rápido posible.” La compañía ha pedido disculpas a sus usuarios y han declarado que, pese a que en sus tarjetas gráficas GTX690 el juego funciona bastante bien, existen problemas que deben solucionarse, como la habilitación de filtros gráficos, el aumento de la resolución y algunos errores al azar que cierran el juego inesperadamente.