Hoy, Square Enix ha publicado en el sitio web oficial nuevos detalles e ilustraciones promocionales del RPG de acción, en las que aparece el protagonista del juego, Clive Rosfield y otros protagonistas que participarán en la entrega.

Aunque todos esperaban que heredara las llamas del Fénix y despertara como su Dominante, el destino eligió a su hermano menor Joshua para llevar esta carga. El primogénito del Archiduque de Rosaria, Clive Rosfield, se dedicó a dominar la espada. Su práctica da sus frutos cuando, con tan solo quince años de edad, gana el torneo ducal y es apodado el Primer Escudo de Rosaria, encargado de proteger al Fénix y bendecido con la capacidad de blandir una parte de su fuego. Por desgracia, la prometedora carrera de Clive terminará en tragedia a manos de un misterioso Eikon oscuro, Ifrit, que lo pondrá en un peligroso camino hacia la venganza.

Por su parte el segundo hijo del Archiduque y hermano menor de Clive, Joshua, se despertó como el Dominante del Fénix poco después de su nacimiento. A pesar de su educación noble, Joshua trata a todos los súbditos de su padre con calidez y afecto, ninguno más que Clive, a quien admira profundamente. Joshua a menudo se lamenta de que fue él, el frágil y estudioso hijo menor, a quien se le concedió el mando de las llamas del pájaro de fuego, y no a su hermano más fuerte y valiente.

Por último, se ha presentado una primera introducción de Jill Warrick. Nacida en los Territorios del Norte caídos, Jill fue sacada de su tierra natal a una temprana edad para convertirse en pupilo de Rosaria, asegurando la paz entre las dos naciones en guerra. El Archiduque insistió en que se criara junto a sus hijos y ahora, a los doce años, forma parte de la casa de Rosfield tanto como Clive y Joshua. Siempre amable, cortés y sin pretensiones, Jill se ha convertido en una confidente de confianza para los hermanos.

El sitio web ofrece también un vistazo al complejo reino de Valisthea, una tierra bendecida por la luz de los Cristales Madre, montañas de cristal resplandecientes que vigilan el mundo bajo sus pies. Durante generaciones, la gente ha acudido en masa a estas balizas para aprovechar su bendición, utilizando el éter para conjurar magia que les permite vivir vidas de comodidad y plenitud. Alrededor de cada Cristal Madre han surgido grandes poderes, y desde hace mucho tiempo ha reinado una paz incómoda entre ellos. Sin embargo, ahora la paz flaquea cuando la expansión de la Ruina amenaza con destruir sus dominios