Plataforma: Xbox 360
La adaptación y reconversión de la industria del videojuego a un sector de público más amplio, ha traído consigo algunas consecuencias que no son del agrado de algunos sectores de jugadores veteranos, como supone la rebaja en los niveles de dificultad que presentan los juegos, que se lanzan en un mercado cada vez mas generalista y enfocado a grandes masas de consumidores de amplios espectros de edad.
Entre los críticos con esta rebaja en los niveles de dificultad que presentan los actuales juegos se encuentra algún componente de la plantilla de Ruffian Games, como Billy Thompson, director creativo de Crackdown 2, que se ha declarado un nostálgico de esas largas jornadas de juego en pos de superar una fase.
“Tengo que decir que me preocupa que estemos diseñando videojuegos que sean potencialmente demasiado fáciles de completar”, explicaba Thompson. “Todavía miro hacia el pasado, los días en que los juegos de Spectrum eran tan difíciles que era una locura terminarlos”. Thompson, consciente del momento que vive la industria, aclara: “Sé que no podremos hacer nunca más videojuegos que sean tan difíciles. Estamos apuntando a un tipo de audiencia para la que, hacer una cosa así, sería un suicidio comercial. Sin embargo eso no detiene mi ansia por hacer un videojuego que sea genuinamente desafiante”.