En el juego, será clave que los jugadores se familiaricen con el entorno para encontrar armas o apropiarse de las que dejan tras de sí los enemigos derrotados, aunque habrá que prestar especial atención a los enemigos menores ya que ahora no estarán repartidos aleatoriamente por el mundo, sino que viven juntos en colonias. Del mismo modo, la comida ayudará al protagonista a mantener sus corazones y podrá aportarle una mejora o habilidad temporal que le servirán de sustento. Según describen desde la propia Nintendo, ‘The Legend of Zelda: Breath of the Wild’, rompe con algunas de las convenciones de la serie.
El mundo que rodea a Link es salvaje y deberá prestar atención a cambios en las condiciones meteorológicas, puesto que tendrán repercusiones sobre su entorno y su capacidad de sobrevivir. Un chaparrón repentino podría extinguir una fogata y las armas metálicas de Link podrían atraer un relámpago. Los jugadores harán bien en contar con ropas cálidas y con una alternativa más ligera para los calores desérticos.
El protagonista, viajará por praderas, bosques o cumbres montañosas, podrá escalar torres y grandes estructuras para orientarse sobre el terreno, o alcanzar la cima de las montañas escalando. Del mismo modo, podrá desplazarse haciendo parapente hacia zonas bajas e incluso usar su escudo como si fuera un trineo para descender una montaña.
Hyrule estará salpicado con más de 100 santuarios que podrán ser descubiertos y explorados por los jugadores en el orden que más les plazca. Los puzles y la exploración serán claves en la entrega, ya que permitirán obtener objetos especiales y otras recompensas que serán de ayuda durante la aventura. Por último, como es habitual, se ha confirmado compatibilidad con amiibo. En esta ocasión, ‘The Legend of Zelda: Breath of the Wild’ contará con una serie de figuras específicas que incluye Link Arquero, Link Jinete y un ‘Guardian”, el primer amiibo con partes flexibles. El amiibo de Link Lobo ya existente también será compatible con el juego.
La próxima entrega de la popular serie lleva mucho tiempo en desarrollo y originalmente tan solo estaba planeado su lanzamiento para Wii U en 2015. Posteriormente, Nintendo desplazó la fecha de estreno hasta 2016, para finalmente retrasar la entrega hasta 2017. De este modo, el lanzamiento de la serie clásica tendrá lugar simultáneamente para Wii U y NX. La compañía defiende que ambas versiones se han desarrollado paralelamente y alega que el tiempo extra se empleará para dar a los desarrolladores el tiempo necesario para perfeccionarlo.
The Legend of Zelda: Breath of the Wild - E3 2016