Si nos atenemos a los hits de las pasadas navidades con títulos como 'Fifa 15', 'GTA V', 'Just Dance 2015', o 'Call of Duty' entre otros, no responden precisamente a los cánones que dentro del sector se imponen como la norma básica para la creación de videojuegos de éxito. Además, podrían detallarse otros muchos ejemplos de títulos que tras ser aclamados por las críticas, su presencia en las estanterías de los propios usuarios es más que deficitaria, léase el caso de 'Deus Ex: Human Revolution'. En las antípodas de este concepto inicial podría catalogarse el éxito de algo tan mundano como el Candy Crush creado por Tommy Palm que a juicio de los entendidos sería una falta de respeto considerarla como videojuego, pero que sus más de 500 millones de descargas harían fríamente pensar lo contrario.
Un sector no tan avanzado
Parece que el mundo de los videojuegos repite al dedillo comportamientos de otras disciplinas artísticas, como puede ser el ámbito cinematográfico, donde grandes directores de cine como Woody Allen o Pedro Almodóvar, están encumbrados a los altares del séptimo arte, si bien sus estrenos no tienen la relevancia que cabría presuponerles al menos en cuanto a recaudación monetaria. La prensa especializada suele catalogar sus filmes como el súmmum del celuloide pero el público, en la mayoría de los casos suele darles la espalda. Algo similar ocurre con los juegos, donde el adjetivo Indie, de Autor permite alcanzar una relevancia y espacio inusitado en los medios de comunicación que por otro lado sería poco más o menos que una quimera. Al mismo tiempo, esta catalogación inicial permite que de media obtengan una puntuación más elevada que si se tratara de una considerada súper producción. Lo que no está asegurado son las ventas reales de los mismos.
De Valve al gobierno griego
Estos días el sector celebra que con la victoria electoral de Syriza en el Parlamento Griego, se haya hecho público el nombramiento de Yanis Vaoufakis, un antiguo trabajador de Valve, como nuevo Ministro de Economía del país Heleno. Su unión en 2012 a la desarrolladora cofundada por el mediático Gabe Newell, donde desempeñó funciones de analista de mercado de la plataforma Steam, sirve para poner una pica en Flandes y acercar el interés por la política a un ámbito tan ajeno a ella como el electrónico.
En territorio patrio
Son muchos los nombres que pululan en nuestro país cautivos de su presunto brillante pasado, pero sin un presente ni un futuro activo en el sector del entretenimiento. A pesar de ello una pléyade de aduladores mima, cuida y da esplendor a nuestra particular casta electrónica con reportajes atemporales, reclamando su opinión o su presencia en simposios, conferencias o eventos de distinto pelaje donde se les rinde pleitesía. Es más, en algunos casos son los encargados de proyectar el futuro profesional de los más jóvenes que se inician en la industria, ya sea gestionando centros oficiales de estudio o cursos, máster, MBA o cualquier otro tipo de programa formativo.
Como siempre este es una visión subjetiva de una realidad con muchas aristas, pero qué duda cabe que nunca está de más conocer de dónde proceden ciertos comportamientos atávicos que inundan cualquier estrato de la sociedad y que, por lo visto, tienen una capacidad inusitada de clonación.
Deus Ex: Human Revolution Director's Cut - Launch Trailer
