‘Until Dawn’ tiene decisiones trascendentes, miedo grandilocuente, buenas rachas de horror y mucha tensión que se sostiene hasta el final, dejando al jugador sin intención de levantarse del sofá e ir a hacer otra cosa, como mínimo, hasta que amanezca. Pero también tiene bastantes tramos donde se presenta como un justo y digno homenaje a las grandes películas sobre monstruosos asesinos. Pero con ‘Until Dawn’, sucede como con esas producciones malditas que se crean una leyenda urbana a su alrededor ligadas con ambientes que tratan lo brutal, terrorífico o sobrenatural. Para comenzar, el juego se anunció por primera vez en 2012 como una experiencia en primera persona basada enteramente en el controlador PlayStation Move para PS3, pero el proyecto se retrasó en tantas ocasiones que finalmente sustituyeron la generación, y con ello, desecharon el accesorio como elemento para moverse por el juego y optaron por el control habitual.
El club de los bromistas
La obra rápidamente pone en antecedentes para situar al jugador en el contexto adecuado y para que vaya conociendo a un nutrido grupo de amigos que se dedican a gastarse pesadas bromas. El simpático grupo se encontraba hace un año aislado en una casa de campo en las nevadas cumbres de las montañas del norte de Canadá, cuando entre bromas, dos hermanas desaparecen sin dejar rastro. Una vez conocidos los hechos con más profundidad y con un año exacto de diferencia, el hermano restante decide honrar la memoria de las dos y reunir al grupo en el mismo lugar. Pero al parecer el asesino de las chicas sigue allí, esperando nuevas piezas para cazar. A partir de este punto el objetivo del jugador pasa por mantener, aunque solo sea un personaje vivo ‘Until Dawn’, es decir, hasta el amanecer.
La historia se ha utilizado un millón de veces, pero esto no es necesariamente un punto negativo. Para establecerse como homenaje, ‘Until Dawn’ se aprovecha sin ningún reparo de clichés y estereotipos de género para crear una historia divertida que, a pesar de no ser nada original, está muy bien presentada y es interesante y dinámica en la mayoría de las ocasiones. De hecho, los veteranos del terror vibrarán de emoción con las pequeñas referencias que se dan en las mejores condiciones posibles, mostrándose claramente visibles pero sin hacer hincapié en ellas. Se pueden encontrar varias fuentes de inspiración rescatadas del mundo de películas, juegos y libros: la presencia de un psicólogo que hace preguntas y da forma a las respuestas como eventos jugables; la historia de la cabaña aislada, también tiene numerosas fuentes de inspiración en el cine como ‘The Cabin in the Woods’, ‘The Thing’ de John Carpenter y su heladora ambientación, algunos momentos muy al estilo ‘Saw’ y hasta el mismo ‘Predator’ con su visión térmica también está representado en el juego de Supermassive Games.
Pero una buena producción de terror necesita un escenario bien elegido, ya sea el pueblo de Michael Myers, el barrio residencial repleto de secretos y calderas donde achicharraron al soñador Freddy Krueger o el matadero cárnico donde Leatherface hacia hamburguesas con las víctimas de ‘The Texas Chain Saw Massacre’. En el caso de ‘Until Dawn’, esta ambientación la encontramos en un recinto de ocio para deportes de montaña que cuenta con varias localizaciones. Lugares claustrofóbicos donde el hacinamiento y el espacio limitado para escapar permite a los desarrolladores instaurar un estado de incertidumbre, miedo y alerta continua en el jugador. En este aspecto no hay dudas que los guionistas Larry Fessenden y Graham Reznick, dos escritores y directores de cine de terror independientes, han volcado toda su pasión por los clásicos de terror en el juego. Algo de agradecer.
Todos los personajes son un cliché
La coral composición de protagonistas que da vida al reparto de ‘Until Dawn’ es ridículamente maravillosa. Por un lado, tenemos el atleta, la chica ingenua, la heroína casta, el simpático joven que sólo se preocupa de la fiesta y así sucesivamente. Por lo tanto, es inevitable que el jugador simpatice con algunos y no aguante a otros, mientras que el resto le da un poco igual. Esto puede y probablemente debe influir en sus decisiones en el juego: Si te gusta un personaje no le vas exponer a situaciones amenazantes, alejándole de decisiones que involucren riesgo.
El modo de jugar puede parecer algo confuso al principio, pero enseguida la configuración del mapa de controles comienza a ser familiar. En cualquier caso, la combinación de botones para recoger o interactuar con los objetos es poco intuitiva por muy pronto que se convierta en rutinario. En la composición del formato, hay dos momentos en los que participa el jugador. En el primero, actúa sobre el control de los propios personajes para reconocer y explorar los escenarios en busca de pistas o simplemente para alejarse del peligro o elegir una dirección por la que continuar caminando. Pero también debe seleccionar algunas acciones o respuestas utilizando el pad direccional durante los diálogos y el tiempo para elegir es limitado, de modo que también se debe pensar y seleccionar rápido. Pero el jugador también participa de la resolución de Quick time events (QTE). Si, lamentablemente están ahí aunque su uso no es tan exagerado como en otros exponentes exclusivos de PlayStation 4.
En ocasiones la acción cinemática varía en relación al comportamiento del jugador a la hora de pulsar rápidamente las secuencias de botones que aparecen en pantalla. Pero la característica no ha logrado encontrar un lugar adecuado para desarrollarse. Realizar una acción como correr, escalar o saltar, en ocasiones implica seguir la secuencia de botones, mientras que en la gran mayoría de secciones no se requiere aplicar ninguna mecánica. Algo que desconcierta e incide en la sensación de libertad sobre el control de los personajes, además de romper el ritmo de la secuencia.
Elige tu propia aventura
Al igual que sucedía con esas colecciones de libros rojos de los 90 en los que uno podía elegir qué camino tomar durante la lectura, ‘Until Dawn’ ofrece al jugador la posibilidad de decidir sobre la marcha las acciones del personaje. ¿Tomar el atajo o huir por el camino seguro? ¿Dar el arma a algún compañero o quedártela? ¿Gritar para pedir ayuda o permanecer en silencio? Todo tiene una serie de consecuencias justificadas sobre la teoría del "efecto mariposa", es decir, una acción que tendrá futuras consecuencias, tal vez en un evento que no esté directamente relacionado con la elección tomada. Esto además de obligar al jugador a pensarlo dos veces antes de hacer nada, también crea una intensa intención de repetir. Después de todo, el jugador siempre tendrá la curiosidad de saber lo que hubiera pasado de haber elegido otro camino.
Como adelantábamos, el factor de exploración también está muy presente en la aventura. En los diferentes escenarios hay repartidos “tótems” que muestran flashes de lo que podría suceder en el futuro, como una muerte o consejos sobre la manera de avanzar. No garantizan exactamente una secuencia de eventos, pero pueden salvar la vida de alguien si se entienden dentro del contexto. Porque aquí las decisiones si tiene consecuencias graves, en realidad el juego no deja de mover las piezas protagonistas que componen este macabro rompecabezas. Y ni siquiera se puede parpadear: un simple desliz en una escena o apretar el botón equivocado puede significar la muerte de algún personaje. El problema es que el factor de repetición, conocer cómo salvar a los personajes y llegar al otro extremo de la aventura con la plantilla medianamente compuesta, no es tan emocionante como en la primera ocasión y por desgracia no hay más modos de juego ni nada más que hacer. Además hay que jugar cada escena de contexto de nuevo.
Detalles macabros
A nivel técnico ‘Until Dawn’ luce un gran nivel. Los gráficos están muy bien desarrollados y enmarcados. Se percibe un excelente trabajo en la dirección artística, ya sea en pasillos oscuros, en bosques llenos de nieve o deambulando por terroríficas estancias. Los grupos de efectos como la iluminación, niebla y nieve, por ejemplo rayan lo magistral. Es cierto que algunos modelos de cara ofrecen un aspecto extraño al principio, pero no hay problemas realmente graves a este respecto y es fácil reconocer a cada uno de los miembros del reparto. Mención aparte merecen los ángulos de cámara y la selección de estos, muchos de ellos especialmente estudiados para ofrecer cantidad de guiños.
La actuación de voz en castellano es correcta. Los diálogos y el argumento son exagerados e incluso algo esperpénticos, pero crear este clima “película de serie B” es el objetivo del juego desde el principio. Sin embargo la calidad de la localización a la lengua de Cervantes no se acerca, por mucho, a las interpretaciones realizadas por conocidos actores de pantalla grande. Afortunadamente existe la posibilidad de cambiar el idioma en cualquier momento.
Conclusiones
La primera toma de contacto con ‘Until Dawn’ hace justicia a su nombre y es capaz de mantener al jugador pegado al mando hasta más tarde del amanecer. Es un perfecto homenaje al género de terror adolescente con todos esos divertidos clichés y una historia interactiva que eleva las decisiones a un nivel superior. Es lo más parecido que podemos encontrar en forma de videojuego a una proyección de película de terror en casa, pero tomando las decisiones uno mismo y empleando el tiempo necesario para explorar los escenarios y participar en los detalles.
Aunque la historia no es precisamente original, está bien narrada y el formato no deja de ser curioso. El ritmo es intenso y el clima de terror se construye tanto con suspense lento como con sustos inmediatos. Los gráficos se han trabajado con maestría, el audio es impecable y aunque la elección del sistema no es perfecto, a veces deja un falso sentido de la libertad. ‘Until Dawn’ es un juego de terror de calidad, una tensa película de terror adolescente y ante todo, una original manera de dejar al jugador al mando de la situación.
Until Dawn - Launch Trailer
