De jefe en jefe y tiro porque me toca
El desarrollo de Sine Mora es una obra conjunta de Grasshopper Manufacture (No More Heroes y Shadows of the Damned Killer, 7) y Digital Reality, algo que en ningún caso es premonitorio de lo que se incluye en el juego, ya que con Grasshopper, encargado del arte conceptual, se preveía un juego como mínimo interesante, a lo que hay que añadir la intención del equipo de desarrollo de reinventar y revitalizar el género siendo fiel a sus raíces. De esta manera, Sine Mora es un shoot'em up horizontal que presenta un reto muy especial con el tiempo como factor determinante. El título combina las sutilezas del shooter clásico con una presentación más contemporánea. Un bello título de acción que ofrece un modo Historia con un hilo argumental que podía haber ofrecido un poco más y un modo Arcade que adopta un estilo de juego que difícilmente agradará ni a los nuevos jugadores ni a los aficionados al género.
Lo primero que destaca del descargable es la minimalista y elegante presentación de los menús del juego. Una vez comenzamos a jugar, la historia dispara con una narrativa un tanto confusa una trama de robots genocidas y viajes en el tiempo a través de una innecesaria y exagerada cantidad de texto que confunde aún más al jugador, tanto es así que los desarrolladores decidieron que todos los personajes del juego debían ser animales con el fin de presentar las cosas con un punto algo más desconcertante. Una vez inmersos en el juego, las primeras impresiones son bastante buenas. Los deliciosos gráficos en alta resolución se muestran absolutamente espectaculares para un título de Xbox Live Arcade sobre un juego en 2D que se presenta con texturas 3D. Esto permite a la gestión de la cámara un montón de oportunidades para plasmar la acción desde distintos ángulos predeterminados. La combinación de escenarios steampunk con vibrantes cielos azules supone una espectacular toma de contacto que se mantiene durante parte del juego.
En Sine Mora se puede manipular el tiempo de varias maneras e incluye 60 combinaciones de armas para completar los escenarios adaptados a las habilidades del jugador con dificultad creciente. Para nuestra misión contamos con 3 naves (arma principal), varios pilotos jugables (ataque secundario) y varias capacidades de control de tiempo (reducir la velocidad, marcha atrás, y reflexión). En cuanto a la dificultad, Sine Mora dispone de cuatro niveles diferenciados (casual, desafiante, Difícil, Loco) además de los modificadores de dificultad sobre la pericia del jugador. Cada una de las siete etapas que completan el juego rebosa enfrentamientos con unos jefes bastante previsibles diseñados por Mahiro Maeda, de hecho si has jugado más de un shoot em 'up, pronto podrás adivinar a lo que te enfrentarás, como jefes robóticos con forma de araña, tanques gigantes o trenes cargados de torretas. Cada jefe se ha extraído de la misma genealogía del género, ya que en realidad el juego no ofrece nada que cualquier seguidor de la fórmula no haya eliminado con anterioridad. Por otro lado, el nivel de detalle de cada uno de estos monstruos mecánicos es admirable aunque con matices, ya que tanta definición gráfica permite que sea difícil identificar con claridad sus puntos débiles. Teniendo en cuenta que prácticamente todos ellos pasarán rápidamente al olvido colectivo sobre la continua sensación de reciclado, Sine Mora no ha logrado hacerse un hueco entre lo más granado del catálogo de la plataforma de descargas de Xbox 360.
Destinado al olvido colectivo
Durante el desarrollo de Sine Mora tenemos que enfrentarnos a naves y enemigos más pequeños con el objetivo de atrapar los power-ups que dejan con el fin de prepararse para el encuentro con próximo jefe, pero la mayor parte de estos combates únicamente requieren memorización en lugar de reflejos y habilidad. Incluso entonces el juego es capaz de desanimar a cualquier jugador con los daños repercutidos por los escenarios y un nivel de dificultad creciente que permite que cuanto mejor te desenvuelvas en la acción, más difícil se hace el juego, lo que aporta un nivel de incoherencia asombrosamente injusto.
Los jugadores más acostumbrados a tratar con el género, estarán de acuerdo que DeathSmiles o Resurrección DoDonPachi pueden ser muy duros pero ofrecen un conjunto admisible de proyectiles o misiles teledirigidos que guardan cierto orden. No se puede castigar al jugador por participar en la experiencia de forma eficiente y encontrarse cómodo con las mecánicas. Además el juego no es lo suficientemente interesante como para incluirse entre las hazañas desesperadas de los jugadores, ya que mostrándote un poco torpe, el título es bastante accesible en su modo normal. En definitiva, la dificultad creciente e indiscriminada del juego es algo, que se puede aceptar si el núcleo jugable es bueno, pero Sine Mora pronto se convierte en una lenta rutina de jefes. Por ultimo destacar que el juego llega a nuestro país con los textos de pantalla localizados en castellano, sobre una gran banda sonora supervisada por el legendario compositor de Silent Hill, Akira Yamaoka.
Sine Mora - Official Debut Teaser
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Elric Ruiz
