A continuación repasaremos los puntos clave de un título que no defraudará a los amantes de la buena estrategia en consola y para aquellos que prefieren ir abriendo frentes a base de táctica y meticulosa planificación antes de batallar a fuego directo con la única esperanza de que la tropas enemigas sufran mas desgaste que nuestras unidades de campaña y así ir ganando batallas.
Jugabilidad
Antes de comenzar, hay que advertir que las siguientes líneas están centradas en la experiencia jugable que ofrecen las versiones para Xbox 360 y PlayStation 3 del juego, ya que no hemos tenido acceso a la versión para PC, que seguramente ofrezca una experiencia mucho mas estéril al jugador acostumbrado a lidiar con juegos más densos y complejos. Dicho esto, apuntar que RUSE está ambientado en acontecimientos históricos ocurridos en la mega trillada segunda guerra mundial y que acompañarán a nuestro protagonista en una campaña que nos pone en la piel del comandante Joe Sheridan en su fulgurante carrera militar, la cual le llevará a combatir como general contra el frente alemán en los últimos coletazos de la segunda gran guerra. Aunque si el bien es cierto que las misiones están recogidas de acontecimientos históricos, estos han sido modificados y ampliados según el nivel de dificultad que elijamos.
La campaña comienza en Túnez y ya desde un principio se nos dejan las cosas claras, si intentas cruzar las líneas enemigas dando un simple paseo y enfrentándote directamente a las fuerzas enemigas sin planificación ninguna, tu único destino será la derrota, claro y contundente. RUSE no se pierde en ningún momento entre planteamientos vacios aunque como adelantábamos, la campaña no pasa por ser una agradable sorpresa narrativa, más bien se factura pobre y poco motivadora aunque bien trasladada a la pantalla. La base argumental del título recae sobre una fuente de inteligencia alemana llamada Prometeo, la cual está presente como un elemento crucial en el desarrollo de la contienda, además de servir de delgado nexo de unión entre las misiones.
Como avanzábamos las misiones son muy motivadoras e interesantes gracias a la variedad de su planteamiento y en menor medida a la velocidad a la que avanza la historia y nuestras capacidades de gestión, punto que no acaba de funcionar en los primeros compases del juego ya que según avanza la narrativa se van ampliando el número de tropas bajo nuestro mando, la cantidad y diversidad de unidades, recursos y bases, aportando poco a poco elementos estratégicos más complejos.
Otro punto destacable es el tempo de juego, que viene marcado por cada misión. El ritmo no es muy rápido ya que los movimientos de tropas están muy bien plasmados y mover unidades en grandes escenarios necesita su tiempo. Esta particular concepción del tiempo espantará a los jugadores más nerviosos no solo por lo variable del ritmo de las misiones, además nos plantea un segundo reto estratégico importante, cuidar las defensas. Si decidimos enviar todas las tropas a combatir y dejamos nuestros puestos indefensos perderemos la batalla. Por lo que el planteamiento estratégico es completo y nos obliga a pensar y actuar como si se tratase de un conflicto real en el que los dos bandos tienen suficiente capacidad para nadar y guardar la ropa. Para evitar estas situaciones contamos con espías que pueden ser enviados a las líneas enemigas para recabar información, interceptar y desentrañar las ordenes de mando enemigas, etc., lo que nos permite estar preparados ante cualquier sorpresa que nos tenga preparado el enemigo. Pero como el equilibrio una de las señas de identidad de RUSE los enemigos también cuentan con sus unidades de inteligencia a las que debemos engañar enviando, por ejemplo, una avanzadilla de tropas por un área mientras atacamos por otro frente. Además de ofrecernos un interesante e inteligente juego del gato y el ratón, estas unidades aportan algunas mejoras técnicas para nuestro ejército gracias a unas cartas que nos permiten por ejemplo aumentar la velocidad en la que se mueven nuestras tropas.
Según avancemos en nuestra carrera militar contaremos con muchos más recursos hasta llegar a crear nuestras bases, las cuales necesitan líneas de suministro y una importante cantidad de efectivos para defenderlas. Estas bases suponen una gran ventaja, eso sí, una vez que conseguimos controlarlas de forma efectiva.
El control es otro de los talones de Aquiles de los juegos de estrategia para consolas, la dificultad de crear un sistema preciso que se ajuste a las necesidades del juego es francamente complicado en un pad de consola, aunque la versión para PlayStation 3 incluye soporte para Move, mucho más preciso y sumamente gratificante gracias al uso del controlador de navegación que nos permite usar un sistema mucho más parecido a lo que ofrece el ratón. Aún con todo esto, en Eugen Systems han conseguido crear un sistema sencillo y preciso en todas sus mecánicas, ya sea para seleccionar o impartir órdenes. Para ello contamos con un bien planteado y mejor ejecutado zoom que nos permite seleccionar de una forma más bien brusca la unidad y llevarla hasta donde queramos, estratagema grafica que aporta además de vistosidad por el planteamiento de llevar los mapas a recreaciones de maquetas de batalla militares sobre tablero, una rapidez que hace ganar muchos enteros al conjunto general que ofrece el juego al trasladarnos una fuerte sensación de precisión en todo momento.
En referencia a la Inteligencia Artificial, destacar que RUSE se comporta de manera perfecta. Como os adelantábamos el equilibrio es una constante en el juego y es en estas espinosas tareas cuando el título se muestra soberbio, más si contamos que podemos utilizar las determinantes cartas de ventaja. El juego se ha calibrado de manera muy racional y presenta unos niveles de dificultad exigentes y variables según el nivel al que queramos enfrentarnos a la campaña. Aunque definitivamente el nivel más bajo es el más adecuado para las primeras tomas de contacto con el título.
Modos de juego
Además de la campaña contamos con modos multijugador para enfrentarnos a otros jugadores a través de las plataformas online de cada consola, lo que nos permite disfrutar de modos competitivos y cooperativos junto o contra otros jugadores. La experiencia multijugador ofrece un importante complemento a la campaña, que no pasa por ser un buen gestionado tutorial para entrenarnos en pos de batallas contra otros jugadores, ya que tiene y cobra aún más importancia para el jugador una vez finalizada, aun así, los modos multijugador vienen a ampliar de forma notable la experiencia que ofrece el título sobre todo a los aficionados y conocedores del genero. Estos últimos quizás encuentren el juego algo falto de ritmo, por lo que seguramente optarán por enfrentarse en línea en modo competitivo.
Gráficos
El aparatado grafico de RUSE es francamente bueno si contamos que este tipo de títulos están más centrados en el desarrollo de importantes rutinas y amplios escenarios de combate, lo que en muchas ocasiones depara entornos gráficos pobres o faltos de detalle. Pero en Eugen Systems han querido poner toda la carne en el asador y desarrollar un apartado grafico brillante que juega a la perfección con el uso de la luz, los efectos y ante todo la gestión de la cámara, que nos permite controlar y divisar la disposición de nuestras tropas en una cantidad de tiempo muy gratificante, pasando de ver todo el tablero de juego a escenas situadas a pocos metros de la batalla con un gran nivel de detalle en un espacio de tiempo ridiculo. Para apoyar la acción contamos con cinemáticas muy cuidadas entre misiones que cumplen su objetivo con soltura, pero además en plena batalla los laterales de nuestros televisores nos ofrecen varias secuencias bélicas que marchan al compas de las evoluciones de nuestras tropas, aumentando hasta el máximo la parte épica de la acción. Sin duda un elemento que deberían plantearse otros desarrolladores por su absoluta consistencia y apoyo a la acción.
Los escenarios se traducen en kilómetros de terreno efectivo desde el tablero de juego con aéreas bien renderizadas, buenos modelados, una gran utilización de los efectos y un gran tratamiento en la recreación de la luz y el agua. Claro está que tiene algunos pequeños fallos que no son ni mucho menos determinantes pero hay que destacarlos, como el popping o algunos dientes de sierra en los escenarios cuando el zoom trabaja en su distancia más corta.
Audio/ Sonido
El juego nos llega en la línea de las producciones de la editora gala, es decir, con voces y textos en perfecto castellano y algunas de las voces conocidas de radio y televisión que Ubisoft utiliza en la localización al castellano en sus productos más importantes. Los efectos sonoros cumplen con su objetivo.
Por su parte, la banda sonora que nos acompaña en nuestras travesías y transiciones por los menús está basada en temas épicos y de corte bélico en su totalidad, aunque no hay ninguna composición que destaque por su personalidad, más bien todo lo contrario. Sin hacer demasiado ruido y sin aportar nada importante al conjunto general, la banda sonora pasa sin pena ni gloria por todos los escenarios.
Conclusiones
Eugen Systems se apunta un nuevo tanto en el campo más complicado para las consolas con un título que no solo bebe de las fuentes clásicas de los títulos de corte táctico, también se apoya fuertemente en mecánicas estratégicas, pues en más de una ocasión nos toca administrar una serie de recursos invariable, lo hace con un finísimo sentido del equilibrio y un importante apartado grafico que da mas relumbrón a un título muy completo y bien desarrollado para ofrecer un gratificante control con el pad, por no volver a comentar lo que gana jugándose con Move y el controlador de navegación en PlayStation 3. Una pena que el juego comience con un ritmo desconcertante y su historia no aporte ningún punto reseñable. Aun así, RUSE está muy por delante del resto de opciones que se pueden encontrar en el género para la actual generación de consolas.
RUSE - Lanzamiento
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Ruben Matallana
