El volumen nos ofrece una colección para Xbox One, donde se reúnen treinta juegos lanzados por la desarrolladora en varias plataformas durante su extensa trayectoria. Aunque se dejan notar algunas ausencias, también es cierto que entre la selección hay muchos títulos que se han convertido en icónicos y otros que en mayor o menor medida han sido olvidados por el público, aunque forman parte de la historia de la marca.
Videojuegos como los de antes
Nada más comenzar se percibe que ‘Rare Replay’ no es simplemente un listado de juegos. La compañía podría haber optado por una pantalla estática y un menú que mostrase las obras con algunos detalles de las mismas. Pero no. El equipo se ha trabajado una sensacional apertura musical, divertidos menús con acceso a cantidad de extras y una perfecta ambientación que se enmarca en un teatro. En contraposición, la configuración es algo diferente de lo que estamos acostumbrados. Todos los juegos se pueden ejecutar directamente desde ‘Rare Replay’, los más antiguos corren directamente desde la compilación, que permite al jugador salir a un menú para regresar a la plantilla de títulos con tan solo apretar un botón durante unos segundos. Ahora, los títulos originales de Xbox 360 se deben descargar de forma individual, pues se ejecutan desde el emulador que permite correr títulos de la anterior consola de la marca. Aunque no es un elemento negativo como tal, al final las transiciones por los juegos se hacen un poco aburridas por el tiempo que lleva arrancar el emulador de Xbox 360.
La selección de juegos es algo controvertida. Por un lado se destacan clásicos como ‘Battletoads’, ‘Killer Instinct Gold’, ‘Banjo-Kazooie’ o ‘Perfect Dark’, que continúan acumulando una increíble cantidad de virtudes a día de hoy, con otras producciones, digamos, menos memorables. Estos últimos pertenecen a la etapa donde la desarrolladora firmaba como Ultimate Play The Game. Por supuesto que hay jugadores enamorados, por ejemplo, de la fórmula de ‘Slalom’, pero hay mejores exponentes para ocupar ese lugar como ‘Donkey Kong Country’ o ‘GoldenEye 007’, obras que fueron excluidas por problemas con los derechos. Aún con todo muchos jugadores se sorprenderán con el tiempo que llevan peleándose con juegos tan simples y adictivos como los ‘Jetpac’, que básicamente se reducen moverse por el escenario recogiendo piezas y combustible para la nave, a la vez que esquivamos y disparamos a los aliens. El más claro ejemplo del “fácil de controlar, difícil de dominar”.
En cuestión de gráficos y controles
Nintendo 64 marcó el comienzo de la era 3D en Nintendo. Sus gráficos pueden resultar incómodos a primera vista para aquellos que únicamente estén familiarizados con la exquisita reproducción visual de la actual generación. Pero varios de ellos fueron re-lanzados en Xbox 360 y con el tramite ganaron una nueva apariencia, lo que evita que el impacto visual sea tan intenso. Algunas texturas son extrañas, sobre todo en los rostros de los personajes, y con determinados colores que parecen estar muertos al carecer de brillo. Pero nada de esto se puede catalogar como realmente molesto, ya que hay que tener en cuenta que algunos de los juegos ya han pasado la mayoría de edad.
En los juegos antiguos la iluminación recrea espacios muy vivos y por fin se pueden contemplar con nitidez todos los detalles que en su día se elaboraron para cubrir las pantallas con elementos decorativos. Hay que tener en cuenta que ‘Rare Replay’ no es una remasterización completa y que en el caso de los clásicos ni si quiera supone un reclamo. En todo caso los nostálgicos pueden añadir un filtro que imita los efectos de una televisión de tubo, lo que deja imágenes deliberadamente borrosas. Además los juegos lanzados antes de 1996 incorporan un interesante sistema que permite rebobinar el último segundo para evitar la muerte y rehacer un salto, por ejemplo. Algo opcional que no estropea demasiado la experiencia original.
Aquí los jugadores necesitan un tiempo por cada título para acostumbrarse a los controles, sobre todo en los juegos más antiguos. Y advertimos que los juegos que eran difíciles siguen siendo difíciles, pero las imágenes son más fluidas en todos los casos. La buena noticia es que se puede elegir entre jugar con analógico convencional o direccional de acuerdo con las preferencias de cada jugador. En todo caso, el interés de Rare por la compilación es tan sincera que ‘Jet Force Gemini’ ha recibido una última actualización para los controles.
Extras corporativos
‘Rare Replay’ incluye una serie de extras destinados a que el jugador conozca en profundidad la empresa. Se trata de documentales sobre el proceso de creación de los proyectos, videos de los juegos más famosos, arte conceptual e incluso material inédito y proyectos que nunca llegaron a realizarse. El problema es que el contenido está disponible solamente con audio y subtítulos en inglés.
También hay retos que ponen a prueba las habilidades de los jugadores en algunos títulos, como recoger todos los objetos que del inventario en ‘Atic Atac’ o sobrevivir 20 Supershocks de terror en ‘Grabberd By The Ghoulies’. Con estos extras se libera una ingente cantidad de puntos para la cuenta de jugador de Xbox Live y sellos para desbloquear contenido en la galería.
Esta es la lista completa de juegos con sus correspondientes años de lanzamiento:
Jetpac (1983), Lunar Jetman (1983), Atic Atac (1983) Sabre Wulf (1984), Underwurlde (1984), Knight Lore (1984), Gunfright (1985), Slalom (1986) , RC Pro-Am (1987), Cobra Triangle (1989), Snake Rattle 'N' Roll (1990), Solar Jetman (1990), Digger T. Roca (1990), Battletoads (1991), RC Pro-Am II ( 1992), Battletoads Arcade (1994) Killer Instinct Gold (1996), Blast Corps (1997), Banjo-Kazooie (1998), Jet Force Gemini (1999), Perfect Dark (2000), Banjo-Tooie (2000 ), Bad Fur Day de Conker (2001), Grabberd By The Ghoulies (2003), Kameo (2005), Perfect Dark Zero (2005), Viva Piñata (2006), Jetpac Refuelled (2006), Viva Piñata: Trouble in Paradise (2008) y Banjo-Kazooie: Nuts & Bolts (2008).
Conclusiones
‘Rare Replay’ es un completo catálogo que hace homenaje a la trayectoria de una de las desarrolladoras más respetadas por los jugadores, pero sobre todo, es una lección de historia de la industria. En su contra, solo se puede destacar que la selección de títulos podría haber incluido otras importantes aportaciones de la desarrolladora. Pero se ha realizado con más cariño y dedicación de la exigible. La cantidad de juegos es bastante completa, así como su diversidad. En resumen, la complicación ofrece variedad de géneros en los juegos elegidos, gran cantidad de extras como vídeos entre bastidores, desafíos, evocadores gráficos y controles dinámicos. En todo caso es uno de los volúmenes recopilatorios más recomendables y completos que se puede encontrar en Xbox One.
Rare Replay - 30 juegos míticos, una colección épica