Jugabilidad
El comienzo del juego nos ofrece todo lo relativo al argumento que necesitamos conocer, prácticamente nada. El jugador comienza enfrascado en una impresionante juerga que da buena muestra del nivel de entretenimiento que ofrece el complejo. Nuestro personaje, al cual siempre vemos en primera persona, deambula borracho y metiendo la pata entre luces de colores, bellas mujeres, música rap y alcohol, lo que finalmente nos deparará un confortable descanso en nuestra habitación. Pero antes seremos invitados amablemente por un Guardia de Seguridad a abandonar prematuramente la fiesta cuando de manera insólita, algo golpea al guardia que ahora luce un color algo más agresivo en sus ojos. Pero el nivel de confusión y la borrachera no nos permitirán darnos cuenta de lo que está sucediendo, por lo que decidimos beber un último trago en la habitación antes de caer completamente borracho. Cuando despiertas por la mañana rápidamente te das cuenta que algo ha cambiado en los hábitos alimenticios de los empleados y veraneantes del resort. Por suerte no eres uno de los infectados, por desgracia, eres su comida.
Así comienza el juego, y prácticamente todo lo que necesitamos conocer de momento sobre él, lo demás lo iremos descubriendo a toda prisa mientras intentamos sobrevivir en esta producción de Square Enix desarrollada por Techland para PlayStation 3, Xbox 360 y PC. Dead Island combina con ciertas dotes, acción en primera persona con una atención especial a los combates cuerpo a cuerpo, el desarrollo de personajes y la personalización de una amplia serie de armas tanto convencionales como creadas por el mismo jugador. Todas estas características se presentan inmersas en una historia claramente inspirada en las películas clásicas de zombis, algo que se agradece tras sufrir las dentelladas que propinan las recientes hornadas de no muertos que pasean sus carnes putrefactas por diversas producciones. Aquí por suerte contamos con el zombi clásico acompañado por algunas variaciones que añaden algo de tensión al incesante desmembre de cuerpos.
Ambientado en el mundo abierto de una isla tropical, donde el jugador dispone de una enorme cantidad de extensión, distintas hordas de zombis repulsivos nos esperan por todos los rincones de la isla y el centro turístico, mientras desarrollamos diferentes misiones tanto principales como secundarias, ya que el juego se extiende hasta las veinte horas de duración sin necesidad de realizar las misiones secundarias o entretenerse demasiado en labores de exploración, lo que amplía la duración del juego más allá de lo acostumbrado. Nada más comenzar, el jugador debe escoger entre cuatro personajes dotados con habilidades específicas para un determinado tipo de arma. Las opciones pasan por los puños del rapero fracasado Sam B, Logan una estrella del futbol americano, una empleada china del hotel llamada Xien Mei y la ex oficial del departamento de policía de Sídney, Purna. Un conjunto de personajes que además de guardar la paridad, son capaces de afrontar cualquier oleada armados con cualquier tipo de elemento. Tanto que las armas de fuego son los elementos menos interesantes de todo lo disponible en el juego para golpear. Básicamente, cualquier cosa que sea dura y con tamaño suficiente como para golpear a un zombi debe utilizarse como arma. Desde los primeros remos, tuberías, llaves inglesas, palos, hasta pistolas y varios modelos de cuchillos con innumerables posibilidades, todas son útiles y efectivas para liquidar infectados.
El sistema de combate del juego es muy sencillo, tan solo obligando al jugador a centrar con el punto de mira a los muertos vivientes para golpearlos cuanto más mejor. Según la parte en la que impactemos, las posibilidades de nuestra arma y el estado de la misma, determinan el daño y los puntos de experiencia recibidos. Extremadamente sencillo e intuitivo, ideal para una mata zombis donde lo más importante es golpear cuanto más y más fuerte mejor. Conforme el jugador va adquiriendo habilidad a la hora de masacrar carne pútrida, el protagonista va ganando puntos de experiencia que le permitirán pasar de nivel y adquirir nuevas habilidades.
La mecánica de mejora que incorpora el juego es la característica de los RPGs, igualmente intuitiva y de manejo fácil. Cada personaje puede aprender una única aptitud o un conjunto de ellas. Teniendo la capacidad de afectar y variar el modo de juego y los roles que los jugadores adoptarán a lo largo de la aventura. Además dentro de las opciones de personalización, las armas juegan un papel muy importante, ya que disponemos de miles de combinaciones de armas, que también pueden mejorarse, arreglarse o crearse utilizando XP o dinero que iremos recogiendo por el resort o adquiriendo tras solventar algunas misiones secundarias. Por toda la isla hay repartidos banco de trabajo, en los cuales, siempre que se tengan los elementos adecuados, se podrán tratar las armas o crear combinaciones nuevas.
Como adelantábamos, Dead Island cuenta con un sistema de niveles y un detallado árbol de habilidades que abre nuevas misiones y aventuras paralelas con varios objetivos que cumplir. Las particulares características de cada personaje permiten que las armas que dominan sean más potentes y eficaces, por lo que es primordial escoger lo que mejor se adapta a cada uno. Algunos preferirán destrozar zombis, mientras que otros optarán por cortes limpios y secciones brutales, mientras que algunos optarán por pistolas y disparos a la cabeza. Estas diferencias también son evidentes en los diferentes arboles de habilidad de los personajes, que indican las mejoras disponibles para cada clase de arma.
Modos de juego
Además de poder disfrutar de la campaña en solitario, Dead Island incluye un modo multijugador cooperativo con el que hacer frente a las misiones con otros tres jugadores, eligiendo la forma de completar las misiones juntas o sembrar el caos usando la acción en lugar de la táctica. La forma de activarlo es muy sencilla. Cuando alguien se acerca a tu posición y está realizando la misma misión, basta con presionar el botón que se indica en pantalla para compartir el desenlace de la secuencia.
Esta jugabilidad online, funciona de maravilla y nos permite compartir dinero, armas, ítems, además de facilitar bastante la resolución de la tarea. También nos permite, si el resto del equipo ya ha resuelto la misión y están en el punto de checkpoint, teletransporte hasta el lugar necesario para continuar la historia.
Gráficos
El aspecto visual de Dead Island ocupa una posición secundaria dentro de sus virtudes; el juego de Technland abarca una enorme cantidad de territorio con un rico y variado ambiente, lo que hace perder algo de potencia gráfica al conjunto, con defectos gráficos, como pop-in y una pésima definición de las expresiones faciales. El juego en definitiva cumple dejando algunos detalles de calidad, como los contrastes de luz y el resplandor del sol reflejado en el agua. Aún con un apartado gráfico que podría mejorar, encontramos varios ambientes muy diferenciados, como selvas tropicales, playas soleadas, altas montañas y un paisaje urbano. El acabado técnico merecía algo más de atención a los detalles.
Audio/Sonido
El apartado acústico recoge muchas de las virtudes del juego, que cuenta con una banda sonora que logra crear una atmósfera que refuerza el conjunto. Las melodías están destinadas a elevar las dosis de tensión en ciertos momentos del juego. Una característica bastante notable es el gruñido emitido por los diferentes zombis. El juego cuenta con varias modalidades de zombis diferentes, cada una de ellas emite un sonido que varía ligeramente. Los efectos de sonido derivados de las armas también están especialmente logrados, sobremanera las armas blancas en contacto con el músculo y el hueso.
La edición española del juego viene completamente traducida en sus textos con voces originales en inglés, y un doblaje que tampoco pasará a los anales de la industria ni por la elección de las voces ni por la expresividad de las interpretaciones.
Conclusiones
Dead Island es un juego que carece de un guión profundo, una historia interesante o un argumento elaborado. Los enemigos tampoco son novedosos y las mecánicas son extremadamente sencillas. Tampoco es un juego que gráficamente invite a nada, rozando lo vulgar con algún detalle destacable. Pero es uno de los juegos más divertidos de los últimos años. La tradicional matanza de zombis en un marco tan evocador hace que el juego sea extremadamente divertido. La jugabilidad y la gran cantidad de posibilidades que encierra la isla ofrecen el juego perfecto para explorar, destrozar, aplastar, cortar, mutilar y fracturar zombis durante muchas horas. Además, la cooperación multiplayer es muy intuitiva y de fácil acceso. Ideal para quedar con los amigos a tomar unas caipiriñas, un poco de sol y reventar algunos zombis.
Dead Island - Co-op Gameplay Trailer
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Carlos de Ayala