La corporación japonesa ya reveló un recorte inminente de 5.000 empleados a través de sus resultados financieros a principios de este mes, aunque ahora finalmente se ha determinado que va a reducir su plantilla de la división en un tercio, además del cierre de 20 tiendas minoristas en América del Norte. “Si bien estos movimientos son extremadamente difíciles, son absolutamente necesarios para posicionarnos en el mejor lugar posible para el crecimiento futuro”, declara Mike Fasulo, presidente de Sony Electronics en un comunicado. “Estoy totalmente confiado en nuestra capacidad de reconvertir el negocio y lograr nuestro futuro, [además de] continuar construyendo nuestro compromiso impecable a la lealtad del cliente a través de la experiencia de entretenimiento completa que sólo Sony puede ofrecer.”, a pesar de las palabras del presidente, es la tercera venta de bienes que realiza la compañía en poco más de un año. De acuerdo con el diario japonés Nikkei, Sony venderá su antigua sede en el distrito de Shinagawa, en Tokio, que está valorada aproximadamente en 146 millones de dólares.