John Romero y sus estudios Slipgate Ironworks que forman parte de Gazillion Entertainment, están pasando por una mala racha tras el cambio de formato de su primer MMOG, que está consumiendo muchos de los recursos de la compañía, por lo que han decido prescindir de hasta 50 empleados de la desarrolladora. Algunos de los trabajadores que se han visto envueltos en la reducción de personal se incorporarán a otros estudios propiedad de Romero, aunque no la totalidad. En palabras del creativo: "los despidos en nuestro estudio resultan un duro golpe en nuestra trayectoria, y esperamos que les vaya muy bien a nuestros ex compañeros. Formábamos un equipo increíble".