Desarrollo de la industria local
Apelando al sentido práctico, los planes del gobierno ruso estipulan la creación de un gran desarrollador/editor central dispuesto a facilitar el lanzamiento de proyectos de alta calidad reteniendo los derechos de autor. Una parte fundamental del plan depende de la aprobación de una nueva regulación que incentive y fomente soluciones de investigación y capacitación que darán como resultado el establecimiento de un “Rosgame”, un centro para el "desarrollo estratégico" de la industria local, que se centraría en la “generación” de proyectos. Además, la empresa de carácter estatal también ayudaría con la creación de nuevos conceptos, así como con su distribución masiva.
Según Kommersant, las autoridades rusas esperan establecer un nuevo conjunto de instituciones para estabilizar y promover el desarrollo de videojuegos con la iniciativa “Rosgame”, que estipula tres escenarios de inversión diferenciados.
En el primer supuesto, el gobierno invertiría el equivalente a 7 mil millones de euros como una forma de asegurar el ingreso al top 20 global con alguna de sus producciones para el año 2030. En otro escenario más ambicioso, el gobierno ruso invertiría 20 mil millones como una forma de ingresar “directamente” a la industria “produciendo una revolución” en el segmento. Sin embargo, irónicamente los detalles de cómo se lleva a la práctica tal “revolución” no se han aclarado y es un asunto especialmente interesante ya que no cuentan con experiencia, medios o apoyo externo, más si cabe en un periodo marcado por las sanciones económicas.
Inversiones millonarias
Para completar, el país también trabaja con un escenario de “liderazgo total”, que implicaría 50 mil millones de euros en inversiones para transformar el escenario local en una gran herramienta de “soft power” global. En segunda instancia con respecto a la influencia militar y del poder económico, el término traducido como "poder blando", se refiere a la expansión de las costumbres e influencias culturales locales aprovechando la capacidad de estos medios para persuadir y cooptar a terceros para que adopten sus valores. Con todo, Dmitry Chernyshenko, ministro de Turismo, Deporte, Cultura y Comunicaciones, ha declarado al mismo medio, que el plan requiere de mucho estudio y que la propuesta final dependerá de las revisiones que hay previstas y de la posibilidad de emplear "medios fuera del presupuesto" para convertirlos en realidad.