Según se desprende de la publicación, durante la temporada navideña de 2018 (es decir, en el período de octubre a diciembre), la casa de Kioto habría distribuido hasta 10 millones de Nintendo Switch en todo el mundo, con una demanda que ha superado las expectativas y ha llevado a un aumento masivo en las ventas de software. Ahora la mayoría de los analistas esperan que Nintendo aumente las estimaciones de benéficos para el año fiscal y situar el nuevo objetivo en 20 millones de videoconsolas vendidas en doce meses, es decir, desde el 1 de abril de 2018 al 31 de marzo de 2019.