Comparando directamente la nueva portátil de la compañía con la descartada 3D Wii, Miyamoto afirma con aplastante lógica que: "3DS es una consola portátil y funciona sin gafas. Para un salón o un cuarto de estar los usuarios necesitan un televisor que soporte 3D, y todavía pasará algún tiempo antes de que la mayoría de los hogares tengan televisores en 3D".