Una experiencia multijugador en la que los jugadores de ambos equipos pueden verse infectados por la cepa del virus, con una modificación de la distribución de jugadores y objetivos en plena partida. Compuesto por dos equipos de cuatro humanos, y un equipo de uno o dos mutantes, los mutantes tienen la habilidad de hacer girar a sus combatientes humanos, y el resultado es que el equipo va cambiando a medida que la partida avanza. Con una jugabilidad basada en el trabajo en equipo, pero con una puntuación individual, la clave para obtener mejores resultados es mantenerse activo. A lo largo de la partida, existen varias maneras de puntuar y en ocasiones ayudar a compañeros de equipo o incluso a enemigos puede dar ventaja.
Kill Strain - Gameplay tráiler