El equipo de Digital Extremes define la secuela como un pozo de oscura imaginativa violencia con su juego brutal que permitirá a los jugadores acuchillar, agarrar y lanzar objetos y enemigos con su Brazo del Demonio mientras abre fuego con dos armas. Lleno de detallados usos de la oscuridad versus la claridad, el juego nos invita a sepultarnos en un nuevo nivel de sofisticación de combate. El juego añade una profunda y retorcida narración y empuña una violencia estilística que es visualizada a través de unos gráficos de estilo noir dibujados a mano que lo mantienen fiel a sus orígenes del comic e impresionarán a nuevos jugadores.