En principio, este acuerdo únicamente desenreda uno de las tres grandes citas que las corporaciones tiene en los juzgados, por lo que es previsible que las hostilidades regresen cuando Activision tenga que declarar ante la Corte Superior de Los Ángeles el próximo 29 de mayo debido a la demanda colectiva interpuesta por alrededor de 40 antiguos empleados de Infinity Ward, así como la querella de los creadores de Call of Duty.