A colación de lo anterior, la iniciativa PlayStation Talents continúa sumando proyectos de factura española para las plataformas de Sony. El último de la promoción no es otro que ‘Baboon!’, un título desarrollado en territorio nacional que lleva al jugador a un colorido mundo donde un macaco debe hacer frente a un mono-pirata a base de cañonazos. Relevo, el estudio encargado de este peculiar videojuego, lanzó su propuesta en PlayStation Vita hace algunos años, y ahora se encarga de su adaptación a PlayStation 4 trasladando toda su esencia de manera íntegra, aunque sin añadidos destacables. Amantes de las plataformas, los puzles y la habilidad milimétrica, preparad vuestros DualShock 4.
El mono incapaz de saltar
A pesar de tratarse de un videojuego directo, que se apoya en la jugabilidad antes de presentar narrativas elocuentes, ‘Baboon!’ cuenta una pequeña historia que sirve como hilo conductor ante los diferentes mundos a los que asistiremos. En resumen, la trama de la aventura nos lleva a controlar al babuino Tumbili, descendiente de un famoso mono de la región, en una aventura que nos invitará a detener los planes del macaco-pirata Baboon.
Sin embargo, y a diferencia de lo que pudiera parecer leyendo estas líneas, nuestro peludo protagonista es incapaz de hacer uso de las habilidades que tiene un mono: no sabe saltar, y tampoco es capaz de impulsarse con lianas. Entonces, ¿qué puede hacer este intrépido y simpático personaje? Pues muy sencillo: colocar una bomba a sus pies y aprovechar la explosión para moverse por el escenario.
De hecho, este es el principal atractivo de la obra, pues nos encontramos delante de un estupendo videojuego de plataformas de corte vertical donde nuestro objetivo será llegar a meta, situada a cientos de metros del nivel del suelo. Pero, obviamente, entre el principio y el final de cada fase tendremos multitud de peligros que tendremos que sortear, ya sea en forma de enemigos o estructuras peligrosas.
Comenzaremos la obra aprendiendo las habilidades básicas del macaco, en una serie de niveles que sirven de tutorial para movernos por el entorno y sortear a los enemigos. Colocar una bomba a nuestros pies y decidir la dirección y la potencia de la explosión serán una constante dentro de la aventura, pues será nuestra curiosa manera de movernos dentro del entorno.
A primera vista puede parecer que el videojuego no ofrece un reto apto para los más adictos al entretenimiento digital, pero nada más lejos de la realidad, pues la obra ofrece un desafío constante introduciendo, cada vez que pasamos de nivel, nuevas mecánicas que añaden complejidad al cómputo global.
Una bomba para cada ocasión
Como decimos, el videojuego basa su jugabilidad en una de las grandes premisas de la industria: fácil de comprender, difícil de dominar. Y es que Relevo ha optado por ir añadiendo complejidad al asunto para evitar que el jugador sienta la monotonía con el mando de control. Así, nos encontraremos, en fases avanzadas, diferentes tipos de bombas que tendremos que equiparnos para superar las fases: bombas de hielo, bombas de fuego, nuevas equipaciones que ofrecen protección extra, imanes para que los plátanos –repartidos por el escenario y que sirven de moneda de cambio en la tienda- vengan directos a nosotros, etcétera.
El ensayo y error tiene mucho que ver dentro del videojuego, pues en ocasiones nos hemos encontrado con que un pequeño desliz a la hora de apuntar hacia dónde va el macaco nos ha hecho perder una vida. Pero no sólo eso, ya que las fases están diseñadas para ser completadas en un tiempo determinado, por lo que si no somos lo suficientemente hábiles perderemos la partida. ¡No hay tregua en Isla Plátano!
El videojuego está compuesto por siete mundos completamente diferentes, que requerirán de diferentes explosivos y que, a la postre, ofrecen algunos combates contra los jefes finales. Estos combates, de hecho, son uno de los mejores puntos del videojuego, pues tendremos la obligación de comprender las rutinas de los aliados de Baboon para poder superar el nivel y acceder al siguiente. Sin embargo, y ahora entraremos en materia técnica, estos combates contra los enemigos finales nos dejan la sensación de que, al menos en materia gráfica, estamos ante un videojuego con escaso presupuesto.
La alianza País Vasco – Japón
¿Es posible encontrar un videojuego de estética manga desarrollado fuera de tierras japonesas? La respuesta nos la da, efectivamente, ‘Baboon!’. El videojuego vasco ofrece una mezcla de diseños bastante curiosa, siendo el personaje principal y los enemigos los más detallados. Pero, más allá de eso, nos encontramos con humanos de estética manga, que nos invitarán a realizar algunos objetivos adicionales que le dan más vida útil al videojuego. Estos diseños no están a la altura de los grandes títulos de factura japonesa, pero resulta curioso ver como un videojuego nacional hace uso de la estética manga para presentar su obra.
En general, el videojuego hace uso de una paleta de colores muy vistosa, con diseños bidimensionales muy contrastados que, si bien quedaron genial en PlayStation Vita debido a sus características únicas, no logran sorprender tanto en una pantalla de grandes pulgadas. De hecho, apenas hay diferencias más allá del aumento de la resolución a 1080p, manteniendo la tasa de imágenes por segundo constante sin pérdidas de ningún tipo.
Sin embargo, donde la influencia japonesa alcanza su mayor esplendor es en el apartado sonoro, cuyo tema principal se repetirá una y otra vez en nuestra cabeza tras la primera escucha. Sin ir más lejos, ha sido el estudio nipón Yugen el que ha compuesto las partituras para este videojuego patrio, y el resultado no podría ser mejor. Melodías cañeras, simpáticas y, sobre todo, pegadizas, se unen a unos efectos sonoros que cumplen perfectamente su cometido y que acompañan perfectamente el desarrollo de la aventura. Mención especial a los gritos que hace Tumbili cada vez que sufre una explosión.
Conclusiones
La original propuesta de Relevo nos enseña varias lecciones. La primera de ellas es que no es necesario un presupuesto excesivo para hacer un videojuego de calidad, sino que basta con una gran idea y algo de suerte para concebir una obra que se distancia por completo de las obras más genéricas del mercado ofreciendo, al mismo tiempo, un videojuego con personalidad propia. Pero, al mismo tiempo, la obra es un canto que señala el camino a la hora de colaborar entre estudios de diferentes países.
En definitiva, ‘Baboon!’ llega a PlayStation 4 respetando la esencia marcada en PlayStation Vita sin introducir novedades palpables. Quizá con algo más de mimo en las animaciones de los jefes finales o algunos niveles extra justificarían la compra de esta versión para los que ya lo disfrutaron en la portátil de Sony. Pese a todo, si no hemos tenido la posibilidad de tratar con la obra y nos gustan los retos diferentes, este particular videojuego, que además llega a precio reducido, nos invita a demostrar habilidad con el mando sin necesidad de plasmar florituras técnicas en pantalla.
Baboon! - Tráiler