Hoy hablaremos de uno de los clásicos, que probablemente reconocerán los seguidores más interesados en tecnología, pues su lanzamiento en ordenadores se remonta a finales de la década de los noventa. Hablamos del fenómeno ICQ, un antiguo programa para ordenadores de sobremesa que supuso un punto de inflexión donde las salas de chat y el emblemático –y complicado para algunos- sistema IRC soportaba a los primeros navegantes de Internet. La aplicación, ahora propiedad de Mail.Ru, ha logrado hacerse un hueco en el panorama actual tras años relegado al olvido. Ha sabido dar a conocer la fórmula de comunicación entre los jóvenes mostrando una apuesta firme que, sin lugar a dudas, invita a plantearse ICQ como alternativa a la hora de utilizar un protocolo de mensajería rápido y gratuito. Veamos qué nos ofrece.
Mensajería instantánea, llamadas y conferencias gratuitas
Con el uso tan extendido de las redes 4G, los usuarios que más tiempo dedican al teléfono cuentan con un buen puñado de megas de conexión disponibles que pocos logran aprovechar. Con esto en mente, y teniendo en cuenta las nuevas velocidades de conexión, la mayoría de plataformas han incluido en sus servicios, además de la comunicación vía texto, llamadas y videoconferencias de manera completamente gratuita.
ICQ no iba a ser menos. La aplicación se adapta a la conexión disponible para evitar cortes o llamadas de baja calidad. De hecho, se desmarca de la competencia al ofrecer llamadas de alta calidad incluso con conexiones modestas, algo indicado para los usuarios que no disponen de tarifas potentes. Al tratarse de una aplicación “relativamente” nueva, su recepción no es tan amplia como otras alternativas más populares, pero lejos de incitar a la fragmentación el mercado, el programa propone comunicación directa con las personas de la agenda de contactos enviando SMS completamente gratuitos, sin que el receptor tenga la obligación de tener instalada la aplicación.
Stickers, salas privadas y conceptos del pasado
Sea cual sea nuestro método de comunicación, ICQ parece tener un hueco. Tal y como marcan las últimas tendencias, la aplicación incluye varios paquetes de emoticonos y stickers para esas sensaciones que no pueden transmitirse con palabras. Aquí se pueden utilizar los modelos básicos o bien descargar nuevos paquetes que van actualizándose periódicamente.
Otra de las novedosas características del formato es la posibilidad de crear salas de encuentro a través de enlaces URL para discutir, debatir o comentar un tema en concreto. Atrás quedan los interminables grupos duplicados con gente que no parece aportar nada a la conversación. En este punto, hay que romper una lanza a favor de ICQ por su intención de dar a la aplicación un ritmo más productivo.
Una cuenta unificada para todas las plataformas
La aplicación está disponible para todos los sistemas operativos del momento: Windows, Mac, Linux, iOS, Android, Windows Phone, etcétera. Es decir, sea cual sea nuestro dispositivo, ICQ siempre será compatible. En este punto es interesante una de las funciones que utiliza la gran mayoría de protocolos de comunicación: la transmisión de ficheros. Aquí se pueden remitir archivos de gran tamaño a contactos o enviarnos ficheros a nosotros mismos desde las diferentes cuentas. Por ejemplo, si tenemos un archivo en el teléfono, podremos enviarlo al cliente ICQ del ordenador para evitar conectar mediante cable el dispositivo.
Gifs animados
Una de las carencias más destacadas de los protocolos de mensajería es su falta de conectividad con algunos de los recursos más empleados en Internet. Hablamos, sin duda, de las imágenes animadas o Gifs. Desde hace décadas, la comunidad no ha dejado de crear interesantes animaciones, ya sean montajes, secuencias extraídas de videos de televisión, para trasmitir todo tipo de sensaciones y comentarios. Esta funcionalidad está disponible para los usuarios de Android. Por otro lado, la aplicación incluye la posibilidad de buscar imágenes por Internet y enlazarlas directamente en la ventana del chat. Se acabó eso de ir alternando entre aplicaciones para pegar enlaces, ahora todo queda integrado en una misma aplicación.
Una alternativa a tener en cuenta
Está claro que todavía le queda recorrido, pero su novedosa puesta en escena y sus características funcionalidades han comenzado a dar frutos. Según cifras de la editora, más de 11 millones de usuarios han dado el salto a ICQ gracias a sus prestaciones, que aseguran, irán actualizándose en función de las tendencias del mercado. En cualquier caso, si queremos probar un nuevo cliente de mensajería o estamos cansados de los mismos grupos de siempre, ICQ podría ser un filtro perfecto para comenzar, de nuevo, a enamorarse de la comunicación en línea.