Cruzando Estados Unidos
De entre la multitud de información que se ha revelado del juego desde el comienzo de su desarrollo, hasta su colocación en los expositores de tiendas y centros comerciales, uno de los puntos destacados por los productores era la posibilidad de jugar en varias ciudades y carreteras de Estados Unidos bajo el paraguas de un mundo abierto gigantesco. De hecho, ésta es la característica que más llama la atención en el juego, un elemento que ahora se antoja demasiado ambicioso para el proyecto.
Cruzar el país desde la costa este a la costa oeste supone realizar una entretenida inversión de aproximadamente 1 hora, lo que, en términos de escala, es mucho. Como si eso no fuera suficiente, los tramos están poblados de elementos que hacen referencia directa a las ciudades involucradas en la carrera. Lugares como Las Vegas, San Francisco, Miami o Nueva York, por ejemplo, nos trasladan hasta sus calles por las similitudes que guardan con las ciudades representadas.
Por su parte, el modo historia de ‘The Crew’ revela una trama tan funcional como poco original. Después de pasar cinco años en la cárcel injustamente acusado del asesinato de su hermano, claro está, en manos de unos pandilleros conocidos como los 5/10, el protagonista de nuestro juego recibe una interesante propuesta del FBI: infiltrarse en la banda para acabar con los dos jefes de la organización criminal, responsables del tráfico de drogas, armas y robo de vehículos en todo el país. Aunque la figura de los 5/10 se presenta como temible, al poco tiempo te das cuenta que realmente no representan más amenaza que las relatadas en las cinemáticas que intentan sostener la historia del juego, ya que en la práctica lo que se percibe es una banda fragmentada, más interesada en luchas internas que en frenar los posibles planes de la policía. En este escenario de incertidumbres internas el jugador encuentra la oportunidad de encargarse de algunos trabajos para los miembros del grupo, lo que permite que finalmente el personaje se vaya integrando en el operativo de la banda.
Nunca conduzcas en soledad
Si ‘The Crew’ tuviera un lema, este sería: "Nunca conduzcas en soledad". Algo que no podía ser más cierto. Durante el tiempo que hemos pasado con el juego, en ningún momento hemos apreciado problemas de conectividad, como por ejemplo servidores inaccesibles. Sin embargo, hay que tener en cuenta que es un juego completamente online. Esto en la práctica ofrece miles de oportunidades para construir nuestra pandilla y participar en diversas pruebas. Prácticamente cada dos o tres minutos se presenta la oportunidad. Pero esto no quiere decir que se puedan reunir suficientes jugadores como para correr. Debido al gran tamaño del mapeado, no siempre es posible encontrar jugadores en línea en un área determinada, y aunque existen muchas oportunidades de interés, prácticamente siempre están faltas de participantes. Esto causa cierta frustración, incluso en las primeras áreas del juego. Prácticamente en ningún momento hemos encontrado ocho personas en línea para disputar una prueba. Siempre hemos tenido que esperar un mínimo de quince minutos hasta que dos o tres personas entrasen en el vestíbulo con la esperanza de disputar la prueba con unas mínimas condiciones de competitividad. Eso nos lleva a otro problema: Si ahora que el juego acaba de ser publicado ya tiene problemas para llenar una sala, ¿cómo será cuando el juego lleve unos meses en el mercado? Nos tememos que un páramo aún más desolado.
La falta de jugadores a nuestro alrededor no sería tan negativa si las misiones de la campaña aportasen algún toque original o distintivo, pero ‘The Crew’ tampoco asegura nada más allá que los viejos trucos que garantizan regulares dosis de entretenimiento: carreras, sprints, contrarreloj, saltos, velocidad en tramos, escapar de la policía, etc. Mucha de la responsabilidad asintomática del juego recae en el limitado y reiterativo sistema de inteligencia artificial adoptado. Es decir, en la práctica el jugador solo disputará cada misión una vez, ya que los pilotos rivales están en pista poco más que para decorar o aportar algo de movimiento a las carreras. La carencia de factores como la superación impuesta o la sorpresa, se interpreta en cualquier caso como la ausencia de algunos de los elementos más divertidos en un juego de carreras y lo convierte en una sucesión de pruebas superadas sin prácticamente ninguna aspiración.
Frenazos técnicos
La parcela técnica de ‘The Crew’ continúa en la misma línea que el resto de apartados jugables y mecánicos. A pesar de contar con escenarios que hacen clara referencia a los lugares donde se desarrolla la aventura sobre sus homólogos en el mundo real, esto no quiere decir que estén bien trabajados o acabados. En la mayoría de los casos las ciudades están literalmente muertas, no hay prácticamente ninguna posibilidad de interacción con ellas ofreciendo la sensación como de moldes de cartón colocados al borde de las calzadas en algunas construcciones.
Por otro lado, los coches no tienen un acabado digno de la actual generación de juegos. De hecho, al utilizar la cámara que muestra el vehículo en tercera persona, el nivel de parpadeo en la parte trasera del coche llega a ser molesto. Como si eso no fuera suficiente hay muchos errores en el título que pueden causar cierto grado de frustración. Por ejemplo, si el coche se queda atascado entre un árbol y una casa, no hay nada que hacer salvo reiniciar la carrera. Pero entre lo más curioso está el hecho de adelantar a un piloto contrario controlado por la IA, que momentos antes se ha salido de la carretera con un brutal accidente y que por arte de magia vuelve a la competición y, sorprendentemente, delante del jugador.
No obstante y a pesar de la gran cantidad de puntos negativos que acumula la producción, no se puede tachar a ‘The Crew’ como un juego completamente espantoso. Esto se debe a que es posible divertirse compensando algunos de los fallos técnicos. Es decir, si el jugador es capaz de obviar los gráficos y olvidar los repetitivos modos de algunas misiones para mantenerse centrado en correr con amigos, si, puede ser interesante para jugar una buena cantidad de meses. Además, hay mucho por explorar. Como se mencionó, el mapa es enorme y terminar el juego con todas sus misiones, objetos secretos y compras puede llevar unas 50 horas.
Conclusiones
En los últimos meses y entrega tras entrega Ubisoft vuelve a caer víctima de sus propias expectativas, y su público, lógicamente, comienza a cansarse. El problema de tener un producto final que no ofrece, ni está en disposición de entregar exactamente lo que se promete, es la reacción del consumidor, algo que según parece la editora ha decidido pasar por alto. Pero aun sin tener en cuenta las altas expectativas, lo que queda de ‘The Crew’ es una propuesta que funciona hasta cierto punto pero que parece inacabada. Para una segunda entrega sería muy recomendable tomarse algo más en serio el desarrollo, mejorando la vertiente gráfica, los modos de juego cooperativos y la inteligencia artificial. Además se podría invertir algo de originalidad en la historia con un protagonista más carismático. Pero aun así, ‘The Crew’ es capaz de acumular unas cuantas horas de entretenimiento.
The Crew - Launch Trailer