Codemasters está empeñada en mostrarnos los horrores de la guerra con Red River, una nueva entrega de su simulador bélico Operation Flashpoint, un shooter de disparos ambientado en contiendas militares ficticias cuyo objetivo es reproducir de manera realista la experiencia de los campos de batalla. La nueva entrega de la serie que obtuvo una notable acogida con Operation Flashpoint Dragon Rising en 2009, primera en manos de Codemasters, ya que la franquicia se creó inicialmente en las oficinas Bohemia Interactive, regresa con su estilo realista y exigente, sin dejar de lado el enfoque en la jugabilidad.
Operation Flashpoint: Red River pretende como en su anterior entrega crear una experiencia que se desmarque de la avalancha de juegos de acción en primera persona que proponen una sucesión de fáciles tiroteos acompañados de secuencias de video, para ofrecer acción táctica y simulación con cierto nivel de exigencia. Aunque parece que el estudio británico ha escuchado las opiniones de la comunidad de jugadores para ofrecer una experiencia más equilibrada y menos dura para el jugador sin perder la esencia de la simulación. Una tarea complicada para un estudio que no ha tenido demasiados problemas en solventar correctamente el asunto.
Jugabilidad
Para la ocasión, el equipo de desarrollo en Reino Unido de Codemasters nos situará en un futuro muy próximo en la cuidad de Tayikistán, un pequeño territorio al norte de Afganistán, donde un grupo de rebeldes se ha sublevado y amenaza con el inicio de una guerra civil. Este punto permite que los ejércitos de EEUU y China tomen medidas sobre el terreno. Las implicaciones del gobierno norteamericano pasan por proteger su despliegue en el país afgano y evitar que sea amenazado, mientras que los asiáticos pretenden evitar que la frontera del país se pierda, ya que supone su entrada principal de contactos con Europa. Estos intereses encontrados terminarán en una sucesión de combates entre todas las partes, lo que nos permitirá enfrentarnos una y otra vez tanto a los rebeldes terroristas como al ejército chino.
Para comenzar, destacar que Operation Flashpoint: Red River es un juego menos complejo que Dragon Rising, ya que varias de las características del juego anterior se han simplificado o han desaparecido. Esta simplificación de recursos y mecánicas permite que un espectro más amplio de jugadores se atreva a plantar cara a Red River, un Operation Flashpoint mucho más accesible y más jugable que Dragon Rising.
Con estas premisas y un planteamiento poco innovador pero muy acertado, la producción nos vuelve a introducir de lleno en un conflicto militar de tintes muy reales que nos invita a hacer un viaje a los infiernos de la guerra, un viaje que compartiremos con cuatro personajes/jugadores de perfiles especializados. Nuestro escuadrón liderado por el sargento Knox, contará con la ayuda de Kirby, Taylor, Solo y Balleto: Asalto, granadero, apoyo y reconocimiento que dan buena cuenta del poderío militar del gobierno estadounidense. Como simulación táctica, el título demuestra que la ambientación es importante y refuerza la inmersión del jugador en la acción, pues la contextualización del combate es tan importante como superar las limitaciones gráficas y Codemasters lo ha conseguido con mucha solvencia.
La campaña nos ofrece la opción de elegir entre las cuatro especialidades: Asalto, granadero, apoyo y reconocimiento. Como es previsible cada una dispone de sus características particulares y sus limitaciones. Cada una de ellas cuenta con un arma principal, un arma secundaria, granadas o minas de diferente tipo, complementos para el armamento y habilidades de combate. Estas habilidades nos permiten ciertas licencias, como apreciar mas distancia en el campo de batalla, recoger mayor número de puntos de experiencia y otros elementos que iremos desbloqueando según participemos en combates.
En su intento de acercarse a un público más casual, Red River ha variado la interfaz, incluso disponemos de algunas opciones de personalización (HUD) Head Up Display, para que cada jugador reciba la información que desee, aunque encontrar el equilibrio entre lo necesario y lo que debe quitarse puede convertirse en un gran reto.
El modo campaña se compone de tres misiones principales que desembocan en varias misiones secundarias con claros objetivos a cumplir. La cantidad y variedad de las misiones es suficiente, proponiendo rescates, incursiones nocturnas, limpieza de zonas de enemigos, etc. El sistema de control no varía excesivamente con respecto a Operation Flashpoint: Dragon Rising, aunque el sistema de órdenes ha sido mejorado, como simulador, Red River no nos permite hacer la guerra por nuestra cuenta a lo Rambo, aquí no podemos salir corriendo con la AK para limpiar una zona de enemigos, la cautela es la única estrategia que no terminará con tu pelotón metido en cajas de madera. Esto a pesar de ser el simulador menos realista de la serie, aunque se mantiene como uno de los más exigentes del mercado. Para ello, el título cuenta con un sistema de control táctico enfocado a enviar órdenes de equipo a los compañeros del pelotón. A través de este sistema podemos activar varios comandos de órdenes para los aliados, como instrucciones de maniobra y de posicionamiento táctico. La inteligencia artificial de nuestros compañeros reacciona a las órdenes de manera mucho más eficiente. Además, todas estas órdenes podemos dirigirlas al equipo en sí o a un solo miembro del pelotón.
Las partidas cooperativas son otro de los alicientes del título, ya que el planeamiento táctico unido a las características propias del juego y su sistema de ordenes pueden confundir a jugadores con poca experiencia, pero el modo cooperativo nos permite transmitir o recibir las ordenes directamente al resto de jugadores, permitiendo que las partidas cooperativas sean mucho más interesantes que la campaña individual, además no hay ningún cambio estructural en el modo de juego compartido.
Gráficos
Aunque gráficamente Operation Flashpoint no es la panacea dentro del género, los efectos de iluminación, el modelado de los personajes, armas y vehículos está muy bien trabajado. Además de ambientes naturales, el juego también explora centros urbanos, que no son tan detallados como los ambientes al aire libre, pero que cumplen con mucha eficiencia su objetivo.
Otra característica de la producción es la fluidez de los gráficos, el juego funciona suavemente a 60 imágenes por segundo, ofrece texturas de buena calidad y buena gestión de efectos de polvo y explosiones. En definitiva el apartado gráfico no llega a destacar en ningún aspecto, aunque cumple sobradamente con todos los objetivos básicos necesarios para una presentación gráfica satisfactoria.
Audio/Sonido
Operation Flashpoint: Red River incluye temas rockeros que comparten protagonismo junto a los clásicos temas orquestales que acompañan las producciones bélicas del estudio británico. Efectos de sonido contundentes y creíbles, mientas el doblaje en inglés está muy bien elaborado. El juego cuenta con textos de pantalla y subtítulos en castellano.
Conclusiones
La acción táctica para consola ya tiene un nuevo referente: Operation Flashpoint: Red River. Un título menos exigente que su antecesor y más enfocado a un público que tradicionalmente opta por producciones menos realistas. Aun con la simplificación de la fórmula, Red River es uno de los juegos de acción en primera persona que mas habilidad requiere por parte del jugador, que encontrará un juego realista, profundo y bien elaborado.