“En Japón, en esta industria, no sólo falta tecnología, aunque lo más importante es la creatividad y el ingenio. También falta eso. Se quejan mucho, hablan mucho, pero no adoptan ninguna medida”, el siempre sincero creativo, también critico la falta de habilidad social de los japoneses, algo que según Itagaki, ha ayudado a la pobre expansión de los juegos japoneses en el último lustro: “Si no tienen habilidades sociales, y son ellos mismos quienes desarrollan un juego, no importará qué intenten hacerlo con una visión más globalmente aceptada y popular, eso será muy difícil,” aseguró.