Los implicados no podrán participar en el torneo ESL One Katowice, cuyo ganador se hace con un premio de 250.000 dólares. A raíz de estos acontecimientos, el jugador Pawel Mocek ha protestado alegando que su equipo ha sido juzgado sin pruebas, a lo que Valve ha decidido, después de investigar profundamente, devolverle a la competición. “Los jugadores fueron restringidos de eventos patrocinados por Valve debido a su actividad y mala conducta”, declaró ayer la compañía. “No obstante, una investigación más extensa ha clarificado los acontecimientos, y la restricción ha sido levantada”, concluye. Valve continuará con las investigaciones.
Counter Strike: Global Offensive – Debut