Para lograr una experiencia mejorada el sistema ha sufrido algunas variaciones, como la pantalla OLED. En lugar de la pantalla LCD de 5″, el nuevo Morpheus VR headset está equipado con una pantalla OLED de 5.7″ con una resolución de 1920 X RGB X 1080. Con ella se expande el campo de visión y se activa la persistencia baja, que elimina el ‘motion blur’ (visión borrosa).
La tasa de refresco anterior se ha visto doblada en este nuevo prototipo, lo que significa que los juegos para Morpheus pueden ser renderizados a 120fps. Al combinar esto con la alta tasa de refresco de la pantalla OLED y la potencia de PS4, la compañía asegura que Morpheus es capaz de mostrar gráficos increíblemente suaves.
Latencia superbaja, importante para proporcionar una experiencia de realidad virtual. Ahora se ha reducido a menos de 18ms, lo que supone la mitad de lo que tenía el primer prototipo. La baja latencia es crucial a la hora de proporcionar una buena sensación de presencia y hacer la realidad virtual cómoda para los jugadores. Para hacer el seguimiento posicional más preciso, se han añadido tres LEDs al dispositivo: uno delante y dos a los lados, lo que supone un total de nueve LEDs para un seguimiento de 360º. Por último y en referencia al diseño, el Morpheus VR headset es más fácil de poner y quitar. La banda de la cabeza soporta el peso de la unidad, de modo que no hay demasiada presión sobre la cara. También se han ajustado y configurado otros componentes para hacer el dispositivo más ligero.
Project Morpheus - GDC 2015