Para disfrutar en familia
‘Zoo Tycoon’ probablemente es el juego más familiar entre la primera oleada de lanzamientos para la nueva plataforma de Microsoft. Con una dirección de arte tan simple como efectiva y una lograda integración con los comandos de voz de Kinect, este didáctico gestor siempre estará disponible para ofrecer un rato de diversión, incluso una vez superada la emoción inicial, el juego se convierte en una gran herramienta para que los pequeños disfruten de los animales en cualquier momento, aunque en contrapartida, la experiencia no ofrece la profundidad suficiente como para llegar a entretener a los fans del género. Producido por FrontierDevelopments, la desarrolladora responsable de ‘Kinectimals’, el nuevo ‘Zoo Tycoon’ es el tipo de experiencia que se disfruta en un ambiente familiar, algo que refuerza el estilo visual, similar a las producciones de cine de Dreamworks y Pixar. Ese espíritu familiar también tiene su reflejo en la jugabilidad del título, que dispone de varios niveles de dificultad. Los seguidores del género podrán pasar tiempo ajustando el precio de las entradas o determinar la inversión en investigación para reducir los costes de mantenimiento; pero también se puede optar por pasar el día ocupándose completamente de los animales mediante minijuegos con los que interactuar con los animales. Aunque estas diferencias entre niveles de experiencia tienen un impacto negativo en relación al grado de dificultad, esta característica se convierte en una interesante opción tanto para aquellos que tienen dificultades para adaptarse al género de la estrategia, como para los que están empezando en el mundo de los videojuegos.
De paseo a golpe de voz
Aunque se puede prescindir totalmente de los comandos de Kinect, para tener una experiencia completa en ‘Zoo Tycoon’, el empleo del sensor de movimiento es necesario para enriquecer cualquier paseo por el parque, o gestionar rápidamente cualquier situación con tan solo una orden como por ejemplo: "visualización de la alimentación animal" - un proceso un poco más lento y torpe con el control tradicional. Pero también se puede usar el dispositivo como una forma de interactuar directamente con los animales, ya sea ofreciéndoles alimentos o aseándolos con chorros de agua. Este tipo de tareas consumen más tiempo del necesario y entran dentro de las labores de mantenimiento, aunque están creadas para tener éxito entre los pequeños y los jugadores con menos experiencia en el control de los accesorios convencionales. En líneas generales, la mejor manera de jugar se encuentra combinando los comandos de voz de Kinect con la selección del menú utilizando el controlador clásico, el cual resulta muy cómodo tras un par de horas con el título.
Aunque ‘Zoo Tycoon’ es claramente un juego orientado a la familia, nada justifica el hecho de que, al final, se presenta como un desafío muy bajo. Incluso en el modo campaña, el cual requiere que ciertas tareas se realicen en un tiempo pre-establecido, la resolución de las misiones no supone un reto gracias a los generosos plazos que ofrece el juego. De todos modos, incluso si el jugador intenta fallar a propósito, el título se niega a que esto suceda, algo que es muy evidente en las modos ‘desafío’ y ‘libre’, cuya única diferencia radica en el hecho de que no existe un límite de dinero para poder invertir. Independientemente de la opción elegida, el título simplemente no dejará que el jugador acumule un saldo negativo a golpe de aumentar los ingresos y recursos a un ritmo bastante alto, incluso sobre un pequeño número de visitantes. Desde el momento en el que el juego deja claro que simplemente no se puede fallar a excepción de la campaña antes mencionada, es difícil no perder un poco de entusiasmo.
Fauna y selva de salon
‘Zoo Tycoon’ es algo repetitivo. Aunque el título de FrontierDevelopments está lleno de especies de animales, accesorios y nuevos hábitats que se van desbloqueando según aumenta el nivel de nuestro parque, mas allá de los retos opcionales que van surgiendo a un ritmo constante, y que en general, tienen una generosa gama de tiempo para completarse, el jugador se encuentra atrapado en un proceso que no varía mucho: la construcción de nuevas áreas, en las que habitarán los animales, esperar un poco para invertir en otras estructuras y volver a esperar para reunir más dinero, lo que nos lleva a restablecer los pasos anteriores. Tampoco ayuda que las tareas adicionales antes mencionadas se puedan completar en cuestión de minutos, y que no presenten demasiada variedad entre ellos. Después de unas horas de juego, probablemente el jugador estará un poco agotado de tomar fotografías de animales específicos o realizar tareas de menor importancia, cuya única misión es despistar un poco al jugador mientras que su zoológico acumula suficiente dinero como para ampliar su oferta. Incluso si el jugador decide investigar a fondo todos los sistemas de evolución que ofrece ‘Zoo Tycoon’, simplemente no encontrará suficientes variedades como para mantener un cierto aire de novedad durante un tiempo.
Aunque a nivel técnico el juego no decepciona dentro de su categoría, existen claras diferencias en el número de detalles entre los diferentes ambientes que se pueden recrear dentro del recinto, así como las texturas entre el personaje controlado por el jugador, los visitantes y los animales hospedados en el zoo. Animaciones y texturas correctas en todo caso que nos servirán para conocer más de cerca a los osos, jirafas, elefantes, o gorilas representados de modo realista con detallados escenarios y texturas menos vistosas, aunque siempre aportando una nota de color extra con pequeñas y detalladas vistas. También se recogen con mucho acierto todos los sonidos y efectos derivados tanto del bullicio de un espacio de estas características como de los animales, recreados fielmente. Todo se acompaña con una banda sonora llena de temas familiares que logran pasar desapercibidos ofreciendo el ambiente deseado.
Conclusiones
‘Zoo Tycoon’ sigue estrictamente las pautas de muchos de los títulos de primera hornada de una plataforma: no es necesariamente malo, pero no termina de convencer sobre un nuevo sistema. Lo que a día de hoy diferencia el juego de las otras opciones disponibles para la plataforma es precisamente su carácter familiar, que lo hace adecuado para las reuniones con familiares o como herramienta para educar y entretener a los más pequeños. Para aquellos mas familiarizados con el género, la oferta incluso puede ser entretenida durante unas horas, aunque finalmente se toparán con la ausencia de desafíos complejos y mecánicas profundas. En resumen, en un momento en el cual Xbox One no tiene demasiado catálogo, vale la pena dar una oportunidad a ‘Zoo Tycoon’, un título que a pesar de sus defectos se muestra competente, aunque está destinado a pasar desapercibido entre la biblioteca de juegos en cuanto la consola de Microsoft comience a recibir mayor cantidad de software de alta calidad.
Zoo Tycoon - Tráiler
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Carlos de Ayala